POSICIÓN DE COPARMEX NACIONAL ANTE LA INICIATIVA DE REFORMA CONSTITUCIONAL EN MATERIA ELÉCTRICA.

 

 

1.   En primer lugar, es importante señalar, que apoyamos la idea de tener una Comisión Federal de Electricidad fuerte, productiva y a la vanguardia en tecnología, y en absoluto creemos que deba desaparecer.

 

2.   Estamos ciertos, que la generación de la energía eléctrica en nuestro país, no debe estar supeditada a empresas extranjeras, ya que correríamos el riesgo de perder la soberanía en esta indispensable fuente de energía, tanto para el bienestar de las y los mexicanos, como para el desarrollo económico y la seguridad de nuestro país.

 

3.   Creemos que es necesaria la participación de la iniciativa privada, tanto nacional como extranjera, para invertir en la generación de la energía eléctrica que va a requerir nuestro país, siempre respetando el medio ambiente. Los recursos aportados por los particulares van a permitir, que el gobierno destine dichos recursos a otras necesidades importantes para nuestro país.

 

4.   Queremos que su precio sea lo más bajo posible para ayudar a la economía de la ciudadanía, y que las empresas mexicanas puedan ser más competitivas, tanto en los mercados nacionales como internacionales.

 

5.   Nos preocupa que con la Iniciativa presentada por el poder ejecutivo, se afecte el medio ambiente en perjuicio de las próximas generaciones y que no se cumpla con los acuerdos firmados por nuestro país ante diferentes organismos internacionales, ocasionando desconfianza en los inversionistas con la subsecuente pérdida de empleos y bienestar.

 

6.   Reconocemos el profesionalismo y capacidad del personal técnico y de los trabajadores de la Comisión Federal de Electricidad. Sin embargo, la mayor parte de la capacidad instalada con que CFE genera energía utiliza recursos no renovables (gas natural, carbón, combustóleo y diésel), los cuáles son costosos y contaminantes; en menor cantidad utiliza recursos renovables, principalmente con hidroeléctricas y de manera marginal otras fuentes como la nuclear.

 

7.   Cabe señalar que, de los combustibles fósiles, el gas natural  es muy poco contaminante y más eficiente, actualmente dependemos en un alto porcentaje del suministro de Estados Unidos, por lo que explotar este recurso con el cual contamos en nuestro país, es una buena opción.

 

8.   Observamos que la CFE, no está invirtiendo en alternativas cuyo costo de generación es más económico como las fotovoltaicas (usando el sol) o las eólicas (usando el aire), y en los últimos años, no ha invertido en hidroeléctricas, quizá porque son inversiones más altas y requieren mayor tiempo para producir. La inversión privada se ha enfocado en energías renovables con menor costo y sin dañar al medio ambiente.

 

9.   Creemos que con la iniciativa de reforma se va a fomentar el uso de combustibles fósiles, en especial combustóleo, ya que Pemex tiene una alta producción de este derivado del petróleo y se le ha dificultado la venta del mismo, debido a la prohibición de su uso por diferentes países por ser altamente contaminante.

 

10.                    Al incentivar el uso de tecnologías más costosas, cómo es que la CFE va a poder bajar los precios de la energía eléctrica, Si sus costos de producción son más altos y disminuyen sus precios, el gobierno va a tener que subsidiar la generación de energía, y el país requiere recursos en muchas áreas como la salud, la educación, la seguridad y la reactivación económica.

 

11.                    Es importante considerar, que la falta de cumplimiento de acuerdos internacionales, y la falta de estado de derecho puede frenar la Inversión extranjera directa y causar una serie de litigios que pueden traer altos costos a las finanzas públicas de nuestro país. Sabemos también que deben analizarse, y en su caso discutir y proceder, si existen cláusulas en contratos con particulares que sean abusivas y perjudiciales para nuestro país, pero siempre dentro de un estado de derecho.

 

12.                    Solicitamos a las y los diputados federales que nos representan impulsen la realización de un parlamento abierto para crear mesas de trabajo en donde especialistas, legisladores, sociedad civil, organismos empresariales y usuarios del sistema eléctrico nacional, analicen las repercusiones que puede tener esta reforma para el desarrollo y el bienestar de las y los mexicanos.