Por: Lorena Meza
Subo a la
tribuna esta tarde con sentimientos encontrados, Tengo Rabia, Indignación, Coraje,
y Temor.
RABIA del crimen que se cometió contra doña Rosita
Tiznado;
INDIGNACIÓN
de que por la perversidad e irresponsabilidad del ex delegado de Tránsito,
Tomás Sánchez Rodríguez, Rosa no esté más con nosotros;
CORAJE de
que haya hoy una familia destrozada, una niña desamparada y una sociedad indignada;
TEMOR de que
ese crimen, PORQUE FUE UN CRIMEN, quede impune.
Hace
exactamente 9 días de la muerte de la señora Rosa Tiznado Altamirano, una mujer
trabajadora y honrada que ese día salió a trabajar, sin saber que sería el
último día de su vida.
No es un
secreto entre los vecinos de Ixtlán del Río, el hecho de que doña Rosa había
manifestado en NO pocas ocasiones el temor que le generaba quien fungía como delegado
de tránsito estatal en Ixtlán del Río, el ya mencionado Tomás Sánchez Rodríguez.
Sus
familiares y amigos afirman que la señora fue acosada y hostigada por parte del
funcionario durante semanas, pero ella no sabía ante quien denunciar el hecho,
pues el delegado era cercano al
recaudador de rentas de la secretaría de Finanzas Estatal en el Municipio, Ing.
Isidro Delgado Camacho, quien a su vez no sólo era funcionario sino que además
es el suplente del alcalde Pepe Alvarado.
Si llevamos
a cabo un ejercicio de empatía, no nos será difícil entender la situación por
la que atravesaba la señora Rosa Tiznado, días previos a la fecha de su muerte.
Imaginen la
desesperación que cargaba en sus hombros
y la angustia de sentirse hostigada y no tener a quien recurrir.
A donde Rosa
se le dejó morir lentamente en un baño de una oficina pública en horas de
trabajo sin mayor auxilio, sin ayuda y completamente sola.
Fue más
importante tratar de escapar que luchar por salvarle la vida y pedir apoyo con
ese propósito.
Médicos
Ginecólogos consultados, coinciden que para una hemorragia como la que
supuestamente le provocó la muerte a la señora Rosa, pueda llevar entre una y dos horas
aproximadamente para causar el deceso, tiempo suficiente para haber solicitado
auxilio, si así hubiera sido, quizá la señora Rosa hoy estuviera con su hija,
con su familia, y sus amigos.
Sin embargo
no ocurrió así, pudo más la
cobardía y la indolencia que el impulso
natural de ayudar a otro ser humano.
La sociedad
ixtlense sabe bien que a Tomás Rodríguez se le detuvo en el vecino estado de
Jalisco mientras trataba de huir.
¡La actitud
de Sánchez Rodríguez nos resulta muy sospechosa!
La
orientación de las investigaciones NO HAN DEJADO CONFORMES A LOS IXTLENSES, NI
A LOS NAYARITAS.
Se percibe
el ánimo de imputar a Tomás Sánchez UNICAMENTE EL DELITO DE ABANDONO DE
PERSONA, un delito que seguramente alcanzara fianza.
Es decir,
que con el pago de una multa, la muerte de Rosita quedaría impune.
Eso es algo
que como ciudadana, como diputada, como
ixtlense, pero principalmente como mujer, ME INDIGNA Y ES ALGO QUE NO PODEMOS
PERMITIR.
Desde esta
tribuna deseo hacer mía la demanda de los Ixtlenses indignados por la muerte de
Rosita, quienes solicitan la renuncia del encargado de la oficina de
Recaudación de Rentas de Ixtlán del Río, dependiente de la Secretaría de
Finanzas estatal.
Solicito al
Ing. Gerardo Siller, titular de esta dependencia que si no renuncia el
recaudador, sea destituido por encubrir el comportamiento que desde hace tiempo
tenía el ex delegado de Tránsito Tomás Sánchez.
Finalizo mi intervención
repitiendo la promesa que le hice a la familia de la señora Rosa el día que nos
manifestamos a las afuera de la presidencia municipal:
NO ESTAN
SOLOS, TAMBIEN YO RECLAMOS JUSTICIA PARA ROSA TIZNADO.