En constante movimiento, siempre en la búsqueda del reconocimiento de la mujer, Cassandra ha participado en diversos foros nacionales e internacionales, hoy invitada por ONU MUJERES, participó levantando la voz por todas y cada una de las mujeres trans.
Hoy
en día ser mujer, ser periodista, ser defensora de derechos humanos, pero sobre
todo ser trans representa una condena en un contrato y un pacto de muerte en
Latinoamérica.
El
Mainstreaming, la transversalización de la perspectiva de género benevolente integra
en la agenda 20/30 una mirada de reojo a la diversidad sexo genérica que debe
agudizarse. La xenofobia y el genocidio que vivimos al día de hoy en el
panorama internacional inmutables ante la muerte nos aleja de la Paz y la
igualdad que tanto pregonamos.
La
patologización de nuestras identidades ha anulado toda posibilidad de acceso a
nuestros derechos básicos elementales, impidiendo la educación y desde ahí
todos los demás en cascada como expresó Ana Güezmes.
La
salud mental como preocupación desde el cuidado y un enfoque de
transfeminización de la pobreza porque más allá de la misoginia y las
relaciones asimétricas del poder. La violencia estructural para nosotras las
mujeres diversas se elevan desde la Interseccionalidad a potencias inimaginables
por el factor odio. Fallamos como sociedad cuando alguien se suicida.
La
transfobia nos está aniquilando tal como nos separa el feminismo excluyente
como bien nos expuso la embajadora Squef.
Latinoamérica
y el caribe arrojan en el panorama internacional drásticas cifras de crímenes
de odio y retrocesos de terapias de conversión. Olvidando todo progreso
respecto al libre desarrollo de la personalidad y sobre todo a la identidad.
Pasajes
como la esclavitud, el santo oficio, el holocausto y todo crimen de lesa
humanidad han sido recapitulados.
El
saqueo que un día como hoy sufrimos nos hermana en la resistencia civil de una
supuesta conquista más allá de la raza y el género. Y repensar la deuda
histórica de tanta sangre derramada de las que fueron decapitadas o quemadas
vivas en la hoguera, las que ya no pueden gritar y hacerse oír, aniquiladas en
el nombre de Dios.
No
vengo a exponer nada que desconozcan, pido una representación de observancia
ante la ONU Mujeres para las Mujeres diversas ante una tibieza de simulación
que no permitirá jamás un cambio fehaciente ni estadísticas desagregadas tan
mencionadas pero inexistentes.
La
Presidenta Mazzina lo dijo ayer, la marginalidad se percibe en nuestros rostros
y nuestras cuerpas, hay una deuda histórica hacia nosotras las mujeres
diversas, migrantes, en situación de calle, afrodescendientes, de pueblos
originarios, lesbianas, trans, discapacitadas, viviendo con VIH o Cáncer o
todas estas condiciones en una sola.
Mujeres
del mundo, el consenso es posible sin endodiscriminación, frenemos el
canibalismo y el hembrismo, enfrentemos nuestro exterminio juntrans
¡Las
mujeres trans nos somos peligrosas, estamos en peligro!!!!!