C O N V O C A T O R I A VI Concurso de Oratoria Juan Escutia

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sábado, 17 de septiembre de 2016

Posicionamiento de la diputada Felicitas Parra Becerra por los 77 años del Partido Acción Nacional



“NO ES TIEMPO DE INVENTAR FUTUROS CON EL PRETEXTO DE QUE INVENTAR FUTUROS SALVA EL PRESENTE, SINO ES TIEMPO DE PRESERVAR EL FUTURO POR LA ACCIÓN RESPONSABLE EN EL PRESENTE” Carlos Castillo Peraza.

Con la representación de mi grupo parlamentario, quiero hacer una profunda reflexión sobre lo que es hoy Acción Nacional a 77 años de su fundación en el frontón México.

Resultaría impensable, hacer una remembranza y omitir en ella el arduo trabajo de don Manuel Gomez Morín, Efraín González Luna,  Luis Calderón Vega,  Rafael Preciado Hernández, Juan Gutiérrez Lascurain y muchos otros hombres y mujeres que decidieron creer en un proyecto de nación.

La creación, implicaba por sí sola, una declaración de inconformidad, y un reto al sistema establecido; fue la manifestación clara de que la sociedad exigía tener injerencia en el poder público y en la toma de decisiones, era el momento en que los ciudadanos dejaban el temor al régimen y tomaban en sus manos los designios de la patria.

Acción Nacional es pues el partido político con el registro más antiguo en la actualidad, desde su fundación entre el 14 y el 17 de Septiembre de 1939. Su concepción como un partido diferente, alejado del concepto de revolución, como un método violento. Mucho más cercano al pensamiento humanista,  permitió un acercamiento puro con la sociedad mexicana.

Se estableció como una opción de cambio, no como un detractor del sistema democrático existente, si no como una opción de gobierno, respetando la democracia.

La lucha no fue sencilla, los triunfos fueron llegando de a poco, en 1947 conquistamos al electorado michoacano y se gobernó por primera vez en Quiroga, era el primer municipio gobernado por Acción Nacional.

El movimiento de almas había iniciado,  elección tras elección, cada vez más hombres y mujeres libres decidieron por Acción Nacional, y no con armas, sino con vocación de servicio se luchaba en las urnas por defender los votos de la oposición. 

 Ya lo decía don Manuel Gómez Morín; 
“Las ideas y los valores del alma, son nuestras únicas armas; no tenemos otras, pero tampoco las hay mejores”

La batalla nunca fue fácil, la lucha nunca fue contra iguales, la pelea no era contra con un enemigo desconocido, la lucha de Acción Nacional, siempre fue por mover las almas, por despertar las conciencias. 

Con un renovado ánimo llegamos a la elección de 1988 con Manuel de Jesús Cloutier del Rincón y ¡cimbramos a México!, la semilla de la democracia plantada en el 39 había germinado y ahora empezaba a florecer por todos los rincones de México.

En 1989 se reconoció por primera vez el triunfo de Acción Nacional en una entidad federativa. Gobernamos Baja California con Ernesto Ruffo Appel, a partir de entonces México no sería el mismo.

Acción Nacional dio a la ciudadanía una opción real de cambio, una ruta a la alternancia y con ella el florecimiento real de la democracia en México.

Con personas como Don Luis H. Álvarez patriota, panista, importante constructor de la democracia, ejemplo de congruencia servicio, honestidad de dialogo abierto y amor por México.

Llegamos a la presidencia de la republica un 2 de julio del año 2000 con 15 millones 989 mil 636 votos, Vicente Fox Quesada encabezó la alternancia a más de 60 años del mismo partido en el poder.

Llegamos buscando comprobar el anhelo del cambio democrático en el que hemos estado involucrados, la férrea voluntad de lucha por el bien común y la decisión inquebrantable de imprimir un sentido ético a todos los actos con un encuentro armónico y pleno entre un pueblo y su gobierno. Un gobierno justo, sensible a las carencias y sufrimientos de su pueblo, con conocimientos de sus problemas y las formas en que deben abordarse para que vivamos mejor. Fe, convicción libertaria, democracia, pasión, compromiso para promover el bien común, y servir al pueblo y muy especialmente a los desposeídos, con personas capaces, honestas y realmente comprometidas.

Demostramos que sabemos gobernar, y que pensar en México, es pensar en una nación para los mexicanos y en un Estado en el entorno internacional.

Ante los desafíos más grandes que suponía la crisis económica de 2008, el estado mexicano supo sostenerse de manera más que responsable, mientras otras economías que se conocen más fuertes que la nuestra, tambalearon.

Abordamos el tema del Crimen Organizado, con estricta responsabilidad, se trató de una guerra que no comenzamos nosotros, y en la cual sin embargo ya se encontraba inmersa la nación y había que afrontarla, y lo hicimos así con el compromiso de servir a México.

Durante las administraciones Panistas impulsamos la creación del Seguro Popular, como un derecho universal a la salud. Los gobiernos panistas hemos convertido en acciones concretas demandas y exigencias de millones de mujeres. Existen varios ejemplos de ello: el Instituto Nacional de las Mujeres, el respaldo a las estancias infantiles, el acceso al crédito, El programa de atención a la pobreza oportunidades, y políticas públicas que reconocen el poder de las mujeres, entre muchos otros.

Como partido impulsamos  la creación de la Secretaria de Función Pública, la ley anticorrupción, y hemos sido incansables promotores de la transparencia como derecho de todos los mexicanos.

Pero sobre todo, incondicionales defensores del voto, respetuosos de la decisión que las mayorías emiten en las urnas, luchadores incansables de la democracia.

Recordamos las  palabras de Don Carlos Castillo Peraza, nuestro ideólogo, de quien conmemoramos el pasado  9 de septiembre 16 años de  su fallecimiento.

“La política no es una lucha de ángeles contra demonios, sino que debe partir del fundamento que nuestro adversario político es un ser humano.”

Resultaría imposible pensar la historia del último siglo de la nación mexicana sin la decidida participación de Acción Nacional.

El reto que hoy nos exige la sociedad es mayúsculo, nuestro deber hacia la ciudadanía supone la postulación de candidatas y candidatos responsables y de probada eficiencia, no son tiempos de improvisados, es momento de llevar a nuestro país a la estabilidad que tanto reclama, necesitamos de hombres y mujeres con verdadero sentido del humanismo, pero que no les tiemble la mano cuando de actuar con justicia se trate.

Las mujeres de mi partido hemos decidido participar en política porque es el instrumento, es el camino que nos permite realizar nuestros sueños pero en especial, colaborar con decisión, trabajo y pasión para que millones de mexicanos, niños, jóvenes, hombres, mujeres, migrantes, indígenas, realicen con menos obstáculos y dolor sus anhelos en la construcción de esta “patria ordenada y generosa” que nos ha inspirado y ha sido en gran medida el propósito que nos da fuerza y aliento. 

Recordamos con mucha estima a mujeres trabajadoras incansables en los años en que ser panista era poco menos que delito, y que ellas presumían con verdadero orgullo.

Son muchas y muy destacadas las mujeres de Acción Nacional, que han ocupado cargos de relevada importancia y que los han sabido conducir con sabiduría y con altura de miras.

Por mencionar algunas como: 

María del Rosario Alcalá,
Norma Villareal de Zambrano,
Blanquita Magrasi,
Florentina Villalobos,
Cecilia Romero,
Esperanza Morelos Borja,
María Elena Álvarez de Vicencio,
María Teresa Ortuño, 
Luisa María Calderón, 
Nuestra candidata a la presidencia de la republica  Josefina Vázquez Mota,
Margarita Zavala,

Y tantas otras que merecen nuestro reconocimiento.
Hoy contamos con regidoras, alcaldesas, diputadas locales, diputadas federales, senadoras, y nada priva que México pueda tener una presidenta panista próximamente.

Nuestro compromiso es con los y las mexicanas, es con los adultos mayores que necesitan protección, es con los hombres y mujeres trabajadores que demandan mayores oportunidades, es con los jóvenes que exigen mejor calidad en su educación y mayores oportunidades de incorporarse a la vida productiva una vez culminados sus estudios.

Pero sobre todo, de cara a la niñez mexicana, nuestro compromiso es con dejarles un lugar para vivir mejor que el que nuestros padres nos heredaron.

Hoy a 77 años de la fundación de mi partido, a 77 años de años de Acción Nacional, seguiremos luchando en esta brega de eternidad,  como sabiamente mencionó Don Efraín González Luna;

“Somos trigo en el molino de la historia y para otros será el pan”

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