Líneas
Por: José
Ma. Narváez Ramírez
No estamos calificando al Doctor
Leopoldo Domínguez de falto de palabra o de incumplimiento de la misma,
solamente estamos analizando las posiciones que viene ocupando, analizando el
equipo que viene conformando y buscando resultados que, en estos momentos son
inmediatos.
Porque
el pueblo tepiqueño está comprobando que Polo viene trabajando arduamente y está
cumpliendo con los problemas más urgentes que requieren pronta solución, como
lo es el bacheo de las calles de las 300 y pico de colonias que tiene la
capital de Nayarit.
Aunque
sería mejor levantar las capas de asfalto y reponerlas por nuevas, pero con la
tremenda escasez de billetes ni pensarlo; cuando menos se están bacheando en forma
rápida y eficaz, y se espera terminar en gran parte, “a paso de camino” para
antes de Navidad. Solamente que en algunos lugares prácticamente no se puede hacer
esta reparación porque primero hay que reparar las vías de acceso… Así están de
olvidados algunos de los asentamientos humanos de Tepic, sin contar con los
serios problemas que vienen presentando las comunidades rurales y que están
siendo atendidas en forma más lenta.
Claro
que existen muchos problemas que se vienen presentando al mismo tiempo que la
reparación momentánea de las rúas, como lo son la recolección de basura, la
atención médica, la acopio de medicinas, la seguridad pública, el alumbrado
público, la dotación de agua, su cloración, el pago de los sueldos, el aumento
a éstos y los atrasados… que suman varios millones de pesos… el reacomodo de
los comerciantes ambulantes y semi-fijos hacinados en el centro histórico, el
exceso de centros de vicio, prostitución y consumo de drogas… y una sarta de
diversos casos que requieren pronta y honesta atención… Pero –el que nunca
falta- el asunto que más interesa a la ciudadanía es saber en qué forma serán
llamados a declarar las personas involucradas en este escandaloso fraude y cuán
será su castigo en caso de que resulten culpables de haber manejado con dolo
los dineros del pueblo. Porque todos esperan que el cambio cumpla con las
expectativas que fueron prometidas en tiempo de campaña, y éstas son –entre
otras muchas- que se castigaría con todo el peso de la ley a todos aquellos que
estén involucrados en estas execrables acciones.
De
ahí en fuera, pues se agradece que Polo esté cumpliendo su cometido, como debe
de ser, aunque le falta la cereza al pastel: que se instruya al cabildo y que
le entren al pedimento de que se haga una auditoría a nivel federal y con eso
quedarían todos contentos. Porque es el pueblo el robado, y es el que les paga
a los empleados de tercera, segunda y primera categoría… o sea desde el
barrendero hasta el presidente y al gobernador, a los diputados, a los jueces,
a los policías, al fiscal y en general al demás equipo.
Así
es que Control… Señores… Control… y de una vez por todas notifíquenle a los
ciudadanos cómo va a estar la jugada… Si no va a haber movimiento, pues díganlo
para no estar enfadándolos y si va a haber, pues como dice el licenciado Pedro,
el magistrado: ¡A los caballos!
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