“El Toro” tiene que implementar medidas más drásticas en SIAPA

Por: José Ma. Narváez Ramírez.

Han sido varias personas las que ocuparon la dirección del SIAPA sin lograr gran cosa en lo que se refiere a hacer que los morosos cubran los adeudos atrasados y actuales a este organismo operador del sistema de agua potable y alcantarillado de la ciudad de Tepic. Estos adeudos suman varios cientos de miles de pesos que hacen mucha falta para regenerar el sistema, perforar otros pozos que sirvan de fuentes de abastecimiento, reparar las tuberías y las tomas correspondientes y dotar de equipos modernos a quienes se encargan de abastecer y reparar las líneas mencionadas. Siempre han quedado hoyancos y baches cuando se trata de un trabajo común y corriente en los que intervienen, y además se han puesto en marcha sistemas de corte que no han servido como se quisiera. No hay dinero para completar el trabajo.

         Una solución podría ser el hacer pública la deuda de estos morosos, sin respeto por desenmascararlos, ya que ellos si se están burlando de las autoridades y éstas no les pueden hacer nada.

         Cuántos ciudadanos de Tepic se pasan por el arco de triunfo la deuda contraída con el SIAPA desde hace varios años, y es el Ing. Héctor González Curiel el que sabe muy bien quienes son estos baquetones que han eludido la obligación del pago por el servicio por influencias o simplemente por desfachatez en el cumplimiento de sus obligaciones, perjudicando a otros que sí cumplen con estos adeudos aunque se les proporcione el agua con deficiencias.

         Se aplicó la medida de cobrar por anticipado el suministro del agua entubada y muchos ciudadanos cumplieron con ella, pero por culpa de los morosos han tenido que soportar graves deficiencias que llegan hasta la falta total del agua. Esto no puede aceptarse así nomás.

         Se había igualmente implementado el cobro con el auxilio de los trabajadores del SIAPA, pero tampoco encontraron eco, por la desvergüenza de muchos usuarios que siguen recibiendo el líquido si pagar un solo céntimo o pagan una cantidad menor que se les acepta con tal de que se mueva la deuda. Algunos hasta presumen de alberca y no pagan nada extra.

         Haciendo una inversión muy alta se procedió a instalar medidores para poder cortar el agua donde hubiera anomalías en los pagos, pero tampoco dieron resultado porque más tardaban en colocarlos que ellos en conectarse de alguna manera subrepticia.

         González Curiel ha hecho observar medidas de golpe para detener estos abusos, y ahora no es fácil eludir el pago porque las autoridades no aceptan la intervención de equis persona influyente que abogue por el moroso y tiene que ser cubierta la deuda, en pagos diferidos o de contado, pero sin arreglos turbios. Pues ni así.

         Se puede hacer una larga lista de los negocios y de sus propietarios, que deben al SIAPA, y la verdad debe de ser publicada para a ver si les da vergüenza ser exhibidos, así como también de particulares que se pitorrean de que no pagan por ningún motivo.

         La Secretaría de Salud tenía en su reglamento que no se podía cortar el agua a ninguna persona, pero ahora esta ley al parecer ya es inoperante porque las necesidades del SIAPA son urgentes y mientras el gobierno federal no meta las narices en resolver la situación, tienen que seguir adelante para encontrar soluciones.

         Recordamos que cuando el Ingeniero González Curiel inició su labor al frente de este organismo, en sus declaraciones a los medios dijo que las necesidades de Tepic ocupaban cientos de millones de pesos para solventarlas, tal vez era una cantidad muy alta, pero el crecimiento de la ciudad capital ha sido gigantesco y las medidas que se han tomado no van acorde con este desmesurado desarrollo. Aquí demostró visión del problema.

         Control… Señores… Control… Tienen que tomarse medidas extremadamente urgentes para sacar de este hoyo a nuestra capital y estas no son otras que obligar definitivamente a los deudores a que cumplan con sus obligaciones… Falta la cloración del agua, igualmente necesaria y cara… en fin… Decía González Curiel que la solución somos todos, porque vamos en el mismo barco, pero unos pagan el boleto y otros viajan de influyentes o de polizontes… No es justo que paguen justos por pecadores… ¿Qué nos pasa?