Líneas
Por:
José Ma. Narváez Ramírez
¿Señor Licenciado Juan Antonio
Echeagaray Becerra, díganos por favor, cuáles son sus opiniones –primeramente-
en el caso de la UAN ?
“Creo
que lo que estamos viviendo en el estado, en principio es una falta de capacidad
que tienen oficinas centrales de la Secretaría de Hacienda, lo vemos clarísimo en el
problema de la Universidad Autónoma
de Nayarit, no sabemos a ciencia cierta, más sin embargo creo que las
universidades son una responsabilidad, no sólo de los universitarios, sino del
gobierno federal, porque a través de ellos, del presupuesto, de los recursos
que envían, es como subsisten las tareas de estas universidades; lamentamos
nosotros que se haya llegado al extremo –después de cuarenta y tantos años de
vida de nuestra máxima casa de estudios- a la suspensión del pago de los
aguinaldos, creo que aquí de manera responsable la secretaría actuó, pero al
parecer por intervención directa del gobierno del estado se logró resolver
financieramente este problema que había, y de esa forma reactivamos nosotros la
vida académica en la universidad”.
¿Y
respecto al estricto control de la entrada a Palacio de Gobierno, que están
haciendo los encarados de seguridad en ese lugar?
“En
cuanto a los niveles de seguridad que se están exigiendo para el ingreso al
Palacio de Gobierno, bueno creo que hay visos de que pudiera agravarse el
conflicto no solo en nuestra entidad, pienso que es una responsabilidad del
estado establecer este tipo de restricciones, más sin embargo ignoramos las
razones, creo que en Nayarit hemos estado viviendo la paz y la tranquilidad,
pero sí llama la atención que estas nuevas medidas para restringir el acceso a
Palacio de Gobierno, el Palacio de Todos, se hayan incrementado; nosotros
esperamos que exista una razón y esta razón únicamente debe de ser: no el
impedir el acceso a un edificio que es público, sino preservar la tranquilidad
y seguridad, no únicamente de los funcionarios y trabajadores, sino de los
propios ciudadanos que acuden a estas instancias para reclamar una intervención
en los asuntos que gestionen”.
Volviendo
al asunto de la UAN ,
ya vio que algunos inconformes pidieron hasta la cabeza del rector, aduciendo
que es supuestamente manejada por un grupo de “mafiosos”; estos señores son
parte del organigrama universitario, algunos ya trabajaron y ahora viven de su
indemnización… ¿Qué me dice de esto?
“Yo
creo que cuando hay un conflicto, siempre surgen voces que reclaman, que el
hilo se corte por lo más delgado, lo importante es que se dio el hecho y hay
que determinar cuáles fueron las causas, y si en relación a las causas que
impidieron el cumplimiento de esta obligación de parte de la universidad,
existen responsables, pues que se busquen; pero sería muy irresponsable pedir
el cese de funcionarios, del rector, sin saber a ciencia cierta si la
responsabilidad es de él –cabe totalmente- o si es de otras instancias. Yo creo
que lo más prudente siempre, el que afirma esta obligado a probar. Si hay una
afirmación, hay que probarla y si se prueba, que se asuman las consecuencias
por parte de quien tenga la responsabilidad. Creo que son voces, expresiones,
pudiéramos decir legítimas o ilegítimas pero al fin son expresiones, que
insisto, se deben en aras de limpiar, de transparentar esta acción, se debe de
buscar a fondo qué fue lo que no se hizo y debió de hacerse para en su caso
encontrar quién es el responsable. NO es fácil allegarse recursos porque todo
tipo de recursos tiene etiqueta, viene destinado para cierto fin y el disponer
de recursos para destinarlos a un distinto fin, también hay desvió de recursos.
Yo creo que aquí finalmente existían las partidas, se destinaron las partidas,
se suspendieron las partidas de dinero, aunque finalmente nos entretuvimos casi
un mes, pero ya fue resuelto este problema, pero insisto, en prevención de que
no se vuelva a dar hay que investigar las causas y sancionar a los
responsables. Ahí tenemos los órganos encargados de la supervisión, vigilancia
y demás, que son las contralorías internas de cada una de las dependencias y la
contraloría general del gobierno, que deben de buscar, finalmente investigar
este hecho y sancionar a los responsables, porque no solo es la restricción de
un cobro legítimo que tiene todo trabajador, sino también en la disposición de
recursos, que es un delito, podríamos decir, que es una violación que debe ser
sancionada”.
Cambiando de tema, le preguntamos al
licenciado Echeagaray, si entre sus inquietudes no está la de ser cronista,
dada su preparación en estas lides de la redacción y de sus conocimientos de
los sucesos históricos, y nos aclaró:
“Lo
único que fui fue Mantenedor de los Juegos Florales de Santiago Ixcuintla, por
azares del destino, y en algunas ocasiones me tocó –a mí también- dentro del
Congreso del Estado, cumplir con algún tipo de funciones relacionadas a eso,
pero lo fundamental para mí, lo que me ha llevado a la narrativa es mi
formación en el aula, mi formación docente, tengo ya 26 años dando clases en la Universidad Autónoma
de Nayarit, y siempre me ha gustado la narrativa, a la mejor por la forma de
estructurar una clase o por la forma de estructurar una exposición o la forma
de estructurar, inclusive en el ejercicio de la profesión, un asunto es lo que
ha llevado a la forma de poder hilvanar ideas para llegar a conclusiones. Hace
muchos años me dijo una persona: puedes tener el conocimiento de las cosas,
pero no solo el tener ese conocimiento, sino debes de tener la forma de
transmitir el conocimiento. Esto te lo digo –me decía esa persona- porque vas a
encontrar en el tránsito de tu vida mucha gente que sabe mucho, pero que no
sabe transmitir ese saber… Cuando quieras trasmitir algo, primero necesitas
observar cuál es el auditorio que tienes, porque debes de tener niveles de
expresión, no puedes utilizar palabras mundanas con gentes que están en un
nivel académico superior y a la inversa, no puedes utilizar un lenguaje elevado
para gente de clase media… Ellos te entenderían de otra forma, entonces de ahí
depende todo: quién tienes enfrente y la
forma en que utilices las palabras y la forma de narrarlas o de expresarlas.
Ese es el meollo, no me puedo expresar de la misma manera con un auditorio
especial o con un auditorio digamos, público al que tienes que usar
constantemente la expresión: si me entendí ¿verdad? Entonces tu sabes como usar
el lenguaje, qué palabras puedes emplear para que el mensaje que tu trasmitas
sea bien recibido y sea entendido”.
Pero… Control… Señores… Control… Si usted no
dispone otra cosa, mañana proseguiremos con estas interesantes opiniones del
licenciado Juan Antonio Echeagaray Becerra.
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